7.2.10

diario sin fechas de iz, xxvii

la calma de esta tarde de domingo, los enormes higos de san juan, despertar a contarte lo que sueño, la memoria engañosa y engañada, la sangre que brota de la herida, la flecha que nunca alcanza el blanco: hay cosas que me recuerdan que es mejor luchar contra estas ganas tremendas de largarme. voy a sentarme a esperar la primavera.

1 comentario:

alonso ruvalcaba dijo...

soñé que te despertabas a contarme tu sueño. me decías: estaba soñando que te veía dormido.

comensales

gepda

gepda
adopta, no compres!